Prácticas
del lenguaje 2 año 2da división. EESN° 30 T.T
Profesora:
Samaniego, Sandra Noemi.
BUENAS TARDES!!!! Estimados alumnos, les envío la
actividad para esta semana. En esta oportunidad les propongo la lectura de un
breve cuento. ACLARO: Sólo una actividad, así de ese modo tienen más tiempo
para poder finalizar las actividades pendientes. Esta deberá estar en la carpeta con fecha correspondiente a las clases: ( martes 14/04/20 y viernes
17/04/20).
Les recuerdo mi mail: sandranoemisamaniego@gmail.com
Trabajo
práctico
Lo fantástico y la ruptura de las
relaciones causales
Lo fantástico
también tiene el poder de desorganizar las relaciones causales y la lógica de acontecimientos.
Juega con las yuxtaposiciones, contradicciones y oposiciones de tramas e historias.
No escapa a ello el tratamiento del espacio y del tiempo con formulaciones que
establecen lo alternativo, entrecruzado, traspuesto con formulaciones que
escapan a lo racional, por ejemplo, a la idea de tiempo homogéneo y rectilíneo.
Lean el
siguiente cuento de Julio Cortázar:
Continuidad de los parques
[Cuento. Texto completo.] Julio Cortázar
Había empezado a leer la novela unos días antes. La
abandonó por negocios urgentes, volvió a abrirla cuando regresaba en tren a la
finca; se dejaba interesar lentamente por la trama, por el dibujo de los
personajes. Esa tarde, después de escribir una carta a su apoderado y discutir
con el mayordomo una cuestión de aparcerías, volvió al libro en la tranquilidad
del estudio que miraba hacia el parque de los robles. Arrellanado en su sillón
favorito, de espaldas a la puerta que lo hubiera molestado como una irritante
posibilidad de intrusiones, dejó que su mano izquierda acariciara una y otra
vez el terciopelo verde y se puso a leer los últimos capítulos. Su memoria
retenía sin esfuerzo los nombres y las imágenes de los protagonistas; la
ilusión novelesca lo ganó casi en seguida. Gozaba del placer casi perverso de
irse desgajando línea a línea de lo que lo rodeaba, y sentir a la vez que su
cabeza descansaba cómodamente en el terciopelo del alto respaldo, que los
cigarrillos seguían al alcance de la mano, que más allá de los ventanales
danzaba el aire del atardecer bajo los robles. Palabra a palabra, absorbido por
la sórdida disyuntiva de los héroes, dejándose ir hacia las imágenes que se
concertaban y adquirían color y movimiento, fue testigo del último encuentro en
la cabaña del monte. Primero entraba la mujer, recelosa; ahora llegaba el
amante, lastimada la cara por el chicotazo de una rama. Admirablemente
restañaba ella la sangre con sus besos, pero él rechazaba las caricias, no
había venido para repetir las ceremonias de una pasión secreta, protegida por
un mundo de hojas secas y senderos furtivos. El puñal se entibiaba contra su
pecho, y debajo latía la libertad agazapada. Un diálogo anhelante corría por
las páginas como un arroyo de serpientes, y se sentía que todo estaba decidido
desde siempre. Hasta esas caricias que enredaban el cuerpo del amante como queriendo
retenerlo y disuadirlo, dibujaban abominablemente la figura de otro cuerpo que
era necesario destruir. Nada había sido olvidado: coartadas, azares, posibles
errores. A partir de esa hora cada instante tenía su empleo minuciosamente
atribuido. El doble repaso despiadado se interrumpía apenas para que una mano
acariciara una mejilla. Empezaba a anochecer.
Sin mirarse ya, atados rígidamente a la tarea que
los esperaba, se separaron en la puerta de la cabaña. Ella debía seguir por la
senda que iba al norte. Desde la senda opuesta él se volvió un instante para
verla correr con el pelo suelto. Corrió a su vez, parapetándose en los árboles
y los setos, hasta distinguir en la bruma malva del crepúsculo la alameda que
llevaba a la casa. Los perros no debían ladrar, y no ladraron. El mayordomo no
estaría a esa hora, y no estaba. Subió los tres peldaños del porche y entró.
Desde la sangre galopando en sus oídos le llegaban las palabras de la mujer:
primero una sala azul, después una galería, una escalera alfombrada. En lo
alto, dos puertas. Nadie en la primera habitación, nadie en la segunda. La
puerta del salón, y entonces el puñal en la mano, la luz de los ventanales, el
alto respaldo de un sillón de terciopelo verde, la cabeza del hombre en el
sillón leyendo una novela. FIN
Breve semblanza del
autor
Julio Cortázar
(1914-1984). Nació en Bruselas (Bélgica) pero pasó gran parte de su vida en Argentina,
y luego en distintos países de Europa. Escribió poesía, cuentos y novelas. Una
de sus obras más importantes es Rayuela (1963). Otros de sus libros son: Final
del juego (1956), Historia de cronopios y de famas (1962) y Octaedro (1974).
ACTIVIDAD:
Anoten en su cuaderno o carpeta las respuestas a los siguientes interrogantes.
1. ¿Qué relaciones
podrían establecer en este cuento entre las ideas de “lectura”, “lector” y “ficción”?
2. ¿Podrían identificar
la historia marco (la trama principal) y la historia incluida (la trama secundaria)?
¿Cómo se cruzan y qué efecto producen?
3. Caractericen los
elementos realistas y cotidianos en este cuento.
4. Lean las siguientes
cuestiones teóricas y relaciónenlas con el manejo del tiempo y del espacio en
el cuento
.
El género fantástico no
se empeña en tratar lo imposible por el solo hecho de que cause espanto, sino
precisamente por su condición de imposible. Invocar lo fantástico es invocar lo
absurdo y lo contradictorio. Lo imposible realizado deja entonces de ser imposible y pierde su carácter fantástico.
[…] Como se sabe, el espacio es tridimensional, homogéneo, continuo, reversible,
común a todos los hombres. Tratemos de imaginar un espacio discontinuo,
individual o cuadrimensional, y estaremos muy cerca de lo fantástico (Louis
Vax. Arte y literatura fantásticas, 1960).
5. Relacionen este
cuento de Cortázar con este otro breve relato del siglo III a. C:
Chuang-Tzu soñó que era
una mariposa. Al despertar ignoraba si era Tzu que había soñado que era una
mariposa o si era una mariposa y estaba soñando que era Tzu.
¿Qué estructura o forma
delinea esta construcción del relato? ¿Qué creen que nos dice del tiempo? ¿Y
del espacio?
6. ¿Qué importancia
tendrá en el cuento “Continuidad de los parques” la frase “Empezaba a anochecer”
en relación con el efecto de loe lo fantástico? ¿Cómo podrías explicar
el título del cuento?